Angelopolitanas
Milenio Puebla
En política, "forma es fondo", y ayer los priistas en torno a su nuevo líder, Alejandro Armenta Mier, demostraron que como funcionarios públicos no tienen el menor pudor para violar la ley.
En un acto político partidista, la CTM recibió con los brazos abiertos a Pedro Díaz García y su Consejo Taxista –el mismo que hace tres años se sumó a la campaña del panista Francisco Fraile en contra de Mario Marín por la gubernatura, como hizo también el hampón Carlos Talavera, que ahora ya forma parte del "Proyecto Z"– y como testigos tuvo en horario hábil a los siguientes funcionarios:
El secretario de Desarrollo Económico, José Antonio López Malo, y los subsecretarios Juan Manuel Vega Rayet y Lázaro Jiménez, de Desarrollo Social y Transporte, respectivamente.
Si Armenta anda recogiendo a los hijos descarriados del PRI, está bien. Pero que lleve como avales a los funcionarios públicos, es tanto como necesitar vejigas para nadar. ¿O no, señor presidente?
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