martes, 23 de mayo de 2006

Operación Padrino


La quinta columna
de Mario Alberto Mejía
laquintacolumna @laquintacolumna.com.mx

Marín pone padrinos a candidatos del PRI

Hasta un hermano de Marín figura en la lista de quienes apoyarán con estructura y relaciones


En reunión privada, el gobernador de Puebla determinó que sus funcionarios y el alcalde de Puebla entren al rescate de los candidatos a diputados federales. Entre los elegidos destacan Javier López Zavala, Enrique Doger, Pericles Olivares, Chucho Morales y Roberto Marín



Arranca la “Operación Padrino”



Mario Alberto Mejía / Funcionarios de primer nivel del gobierno estatal, el presidente municipal de Puebla y el líder del Congreso del Estado, entre otros, apadrinarán a los candidatos a diputados federales de la Alianza por México y pondrán a su servicio tanto estructura como relaciones en aras de obtener victorias en los comicios del próximo 2 de julio, revelaron a CAMBIO cuando menos tres aspirantes priistas consultados por el reportero.


La noche del lunes empezaron a llegar a Casa Puebla —uno por uno— catorce de los dieciséis candidatos de la Alianza por México a las diputaciones. Por razones naturales no fue invitado Ernesto Guerrero, abanderado del Partido Verde por Atlixco, y Jorge Estefan Chidiac se disculpó.
Ahí ya los esperaban el gobernador Mario Marín Torres y Maximiliano Silerio Esparza, delegado regional del CEN del PRI en Puebla.


Los temas tratados en la reunión privada, según las fuentes consultadas, fueron: la elección de Estado que están enfrentando los priistas, las encuestas que pronostican severas derrotas, el riesgo de que el PRI pierda en Puebla hasta ocho distritos y las acciones emprendidas por la Federación con el aval de Los Pinos destinadas a apoyar a los candidatos del PAN.


Entre los funcionarios que fungirán como padrinos de los candidatos destacan: Javier López Zavala, secretario de Gobernación, quien se hará responsable de los distritos 6 y 16; Enrique Doger Guerrero, presidente municipal de Puebla, quien tendrá como ahijados a los candidatos Rafael Cañedo, Nancy de la Sierra y Héctor Alonso Granados, y Pericles Olivares, líder del Congreso del Estado, que apadrinará a Claudia Hernández junto con López Zavala y Omar Álvarez Arronte, director de Gobernación Municipal.


Pero hay más: El diputado federal Jesús Morales Flores tendrá bajo su responsabilidad a Jaime Alcántara Silva (distrito con cabecera en Serdán), en tanto que Roberto Marín Torres y Juan Carlos Lastiri, subsecretario de Desarrollo Social, protegerán a Lauro Sánchez en el distrito con cabecera en Zacatlán.
Finalmente, Juan Manuel Vega Rayet, presidente del CDE del PRI, será el padrino de Estefan Chidiac en Azúcar de Matamoros.







En Puebla: La Enchilada Completa. La noche del lunes empezaron a llegar a Casa Puebla —uno por uno— catorce de los dieciséis candidatos de la Alianza por México a las diputaciones federales.
(Por razones naturales no fue invitado Ernesto Guerrero, abanderado verde por Atlixco, y Jorge Estefan Chidiac se disculpó).
Ahí ya los esperaban el gobernador Mario Marín Torres y Maximiliano Silerio Esparza, delegado regional del CEN del PRI en Puebla.
El tema no podía ser otro: la elección de Estado que están enfrentando los priistas y que culminará el 2 de julio en las urnas colocadas en todo el país.
Marín les planteó un escenario difícil.
Les habló de las encuestas que cada día pronostican severas derrotas electorales.
Les dijo, con datos duros, que existe el riesgo de que el PRI pierda en Puebla hasta ocho distritos.
Les detalló algunas acciones emprendidas por la Federación con el aval de Los Pinos destinadas a apoyar a los candidatos del PAN.
Les relató algunas pláticas que sobre el tema ha tenido con Roberto Madrazo Pintado.
Les aseguró que el Escándalo Marín se ubica en la guerra contra el candidato de la Alianza por México a la Presidencia de la República.
Les insistió que su compromiso de apoyar con todo a Madrazo sigue vigente.
Fue entonces cuando les dio una noticia que no a todos cayó bien: que en cada uno de los dieciséis distritos los candidatos tendrán diversos padrinos políticos que harán todo lo posible para su triunfo y pondrán para ese fin estructura y relaciones.
Y pasó a mencionar los nombres de quienes se meterán de lleno en los distritos.
Veamos:
El mediocre René Lechuga Fosado, asesor en la Secretaría de Gobernación, será el padrino de Alberto Amador Leal en el distrito 1 con cabecera en Huauchinango.
René, hay que decirlo, buscó ser candidato por esa región y le hizo una guerra sucia a quien ahora será su ahijado político.
Por supuesto, eso generó enconos y agravios que no son fáciles de desterrar, sobre todo porque la animadversión de Lechuga en contra de Amador proviene de hace tiempo.
Y es que las envidias son mayores que las coincidencias.
Ante tal panorama resulta difícil imaginar qué efectos positivos le atraerá a Amador Leal el padrinazgo de Lechuga, una vez que éste, por si fuera poco, carece de liderazgo político en el distrito.
Con esos padrinos es mejor no bautizarse.
Por el distrito 2, con cabecera en Zacatlán, Juan Carlos Lastiri, reluciente subsecretario de Desarrollo Social, será uno de los padrinos de quien también quiso vulnerar en su momento: el anticlimático Lauro Sánchez, ex coordinador de Asesores del gobernador, quien tiene una marcada predilección por las Gemas.
Ambos, por supuesto, se detestan y se menosprecian mutuamente.
Y si algo los une es la aversión.
¿Cómo, pues, meterlos en el mismo costal?
¿De qué se trata: de que los candidatos ganen o de que pierdan estrepitosamente?
Pero la lista no acaba ahí: apadrinarán también a Lauro Sánchez el hermano del gobernador, Roberto Marín Torres —frustrado aspirante a candidato—; José Luis Márquez, funcionario de Gobernación que también le hizo su guerra sucio a su ahora ahijado, y Teodomiro Ortega, quien perdió la presidencia municipal con el actual alcalde panista.
Por el distrito 3, con cabecera en Teziutlán, Alberto Guerrero será apadrinado por Jorge Camacho Foglia —también frustrado precandidato— y Carlos Peredo, presidente municipal de la cabecera distrital.
Por el distrito 4, de Zacapoaxtla, Wenceslao Herrera Coyac será apoyado por el diputado local Cutberto Cantorán.
Por el 6 de Puebla, Claudia Hernández tendrá tres padrinos de lujo: Javier López Zavala, secretario de Gobernación; Pericles Olivares, líder del Congreso del Estado, y Omar Álvarez Arronte, titular de Gobernación municipal.
El presidente municipal de Puebla, Enrique Doger Guerrero, apadrinará por su parte a los candidatos a diputados por los distritos 9 (Rafael Cañedo Carreón), 11 (Nancy de la Sierra) y 12 (Héctor Alonso Granados).
Jaime Alcántara Silva tendrá por el 8 de Ciudad Serdán a Chucho Morales Flores.
Jorge Estefan Chidiac —14, de Izúcar de Matamoros— será el ahijado de Juan Manuel Vega Rayet, presidente del CDE del PRI.
Por el 15, de Tehuacán, Álvaro Alatriste apadrinará a su odiado Luis Cobo.
Y por el 16, de Ajalpan, López Zavala apadrinará a su ex secretario Mario Mendoza.
Se aceptan comentarios y mentadas.


http://www.laquintacolumna.com.mx/2006/mayo/columnistas/colu_laquinta_230506.html

viernes, 12 de mayo de 2006

Zavala y su falso dirigente


Jornada de Oriente / Editorial
LAS MANIPULACIONES DE JAVIER LÓPEZ ZAVALA

La farsa que ayer montó el secretario de Gobernación, Javier López Zavala, para presentar a un falso dirigente del Frente Cívico Poblano (FCP), de nombre Ricardo Rafael González Gutiérrez, fue una maniobra carente de inteligencia y de sensatez.

Para nadie es un secreto que al titular de la Secretaría de Gobernación (Segob) le gusta aparecer fotografiado para presumir logros, acuerdos y actividades que en realidad son inexistentes. Como parte de esa dinámica, este funcionario ayer llegó al extremo de querer fingir que el FCP, la organización que encabeza el movimiento que pide la destitución del gobernador Mario Marín Torres, ya estaba negociando con la Segob claudicar en sus demandas.

Este hecho evidencia una vez más que Javier López Zavala no es un operador político eficiente que resuelva problemas al mandatario poblano Mario Marín, sino que, por el contrario, es quien genera nuevos conflictos y obviamente contribuye a seguir dañando la imagen y credibilidad del jefe del Poder Ejecutivo.

Si en el gobierno del estado se quiere mejorar la opinión que la ciudadanía tiene hacia la administración de Mario Marín, es pertinente que se cambie al secretario de Gobernación y se ponga en ese puesto a alguien que realmente tenga capacidad de negociación, de conciliar con grupos opositores y sobre todo que sepa tener liderazgo en el gabinete estatal.

Es evidente que Javier López Zavala es un político que no tenía la experiencia y la preparación para hacerse cargo de la parte neurálgica del gobierno.