Por “institucionalidad” acepta Zavala dejar Segob; el reto es ganar el Congreso, dice
Por Ignacio Juárez Galindo / e-consulta
En tan sólo unas semanas, Javier López Zavala tuvo que poner freno a sus aspiraciones políticas. Primero, declinó buscar la presidencia municipal de Puebla y ceder su lugar a Blanca Alcalá Ruiz; y, después, por orden del gobernador Mario Marín Torres dejó el sábado pasado la Secretaría de Gobernación -la dependencia más importante de la administración estatal-, bajo el argumento que su adhesión a las campañas del PRI en la entidad evitaría la pérdida del PRI del Congreso local.
“Pierdo a mi mejor secretario, pero si queremos conservar la mayoría en el Congreso, tienes que ir”. Con esa frase, Mario Marín le notificó la decisión de convertirse en candidato a diputado local plurinominal, confió Javier López Zavala a un grupo de reporteros durante un desayuno que ofreció ayer. El anuncio se lo hizo tras horas de análisis para definir la estrategia del PRI en las elecciones.
Es más, el político de origen chiapaneco, pero que tiene constancia de ciudadanía poblana, reveló que hasta el sábado por la mañana desconocía la decisión de Marín Torres. Hubo un testigo, dice: el general retirado y secretario de Seguridad Pública estatal, Mario Ayón Rodríguez, quien se comunicó muy temprano con él para preguntarle sobre su salida del gobierno estatal.
Javier López Zavala se declara un político “institucional”, por eso aceptó la petición del Ejecutivo estatal dejar la Segob. Ahora su lugar será ocupado por Mario Montero Serrano, ex dirigente estatal del PRI y frustrado candidato a la Senaduría.
“Soy institucional” esa también fue la respuesta que dio el ahora ex funcionario estatal tras ser convocado junto con todos los aspirantes a la alcaldía de Puebla para notificarles que Blanca Alcalá sería la candidata, pese a que anteriormente difundió en los medios de comunicación su deseo por convertirse en el abanderado.
–Parecería que le convenía más quedarse en la Secretaría de Gobernación por ser jefe de gabinete, tener de su lado a un número importante de secretarios y desde ahí tenía mayores posibilidades de operar políticamente ¿A qué obedece su incorporación a la coordinación de campañas?, se le pregunta.
–Cuando me invita el partido -responde López Zavala, sin poder ocultar un gesto de molestia ante la pregunta- me han dicho que el partido necesita de gente con liderazgo en el estado, que venga a sumar su capital político, me han invitado, soy un hombre institucional y me he sumado.
–¿No le convenía más quedarse en la Secretaría de Gobernación o cual fue su análisis de fondo para asumir esta decisión?, se le insiste.
–No es tanto donde me convenga más, es estar con mi partido, gracias al PRI he sido diputado, director del DIF, coordinador de asesores, secretario de Gobernación y ahora debo servir al partido donde me indique.
–Pero, usted se suma a una campaña que es la más competida en la historia del PRI en Puebla y existe el riesgo de peder.
–No está en nuestro escenario la derrota, de ninguna manera, se han dado muestra claras que el priísmo pasa por un buen momento, la muestra es Yucatán y Oaxaca, hay gran efervescencia y participación política, por eso aquí en Puebla se pelean por las candidaturas, si vieran un partido abatido y en decadencia ni se pelearían.
Antes y después
Antes de dejar la Segob estatal, Javier López Zavala era considerado el segundo hombre más importante de la administración estatal. En los pasillos de Casa Aguayo y el PRI lo llamaban “el supersecretario”. Su influencia política no tenía contrapeso. Eso y otros factores generaron una inconformidad al interior del gabinete estatal, a tal grado que diferentes secretarios estatales organizaron una reunión en un restaurante de la ciudad con la finalidad de enviarle un mensaje político.
El político lo mismo se reunía con empresarios de la capital, viajaba al interior del estado para participar en las Jornadas de Participación Ciudadana o se dejaba ver en actos oficiales en las colonias y juntas auxiliares de la capital. No había conflicto social, político, económico o ambiental que no fuera asumido por el funcionario para atenderlo: el más evidente fue intervenir en la gestión de becas para estudiantes rechazados de la Universidad Autónoma de Puebla.
López Zavala, en entrevista, afirma que el principal reto del PRI en estas elecciones será sumar a los inconformes con los procesos internos para elegir a los candidatos a diputados locales o presidentes municipales. “Hay que sumar, el reto es ganar el Congreso del estado”, puntualiza.
En el Partido Acción Nacional existe temor porque el Partido Esperanza Ciudadana y otros institutos les resten votos y haya un empate en el Congreso del estado. ¿Qué opinión tiene?, se le pregunta. López Zavala, responde: “Yo no veo así, pero respeto la opinión de mis adversarios”
El ex secretario de Gobernación justifica su designación como coordinador de campañas del PRI en la entidad en que en su paso por la administración pública estatal entabló una buena amistad con todos los presidentes municipales –“sólo dos me cuestionaron públicamente…por conflictos que eran al interior del PAN”– y por conocer el estado con exactitud después de haber coordinado la campaña de Mario Marín Torres.
Al ser se interrogado por los reporteros locales sobre su relación con la dirigencia estatal del PRI, en un desayunó “de agradecimiento” que ofreció ayer, se mostró cauto al señalar que su incorporación será sólo con la finalidad de sumarse al trabajo, pero aclaró: “Iré comentando las cosas que no se ven bien… Valentín (Meneses) es mi amigo desde hace muchos años y seguiremos trabajando juntos”.
–¿Para el PAN prácticamente el Congreso lo tiene ganado?, le inquirió otro reportero.
–Pues no lo creo, es así es solo un dicho del PAN.
Mi proyecto
Javier López Zavala no descartó que su salida de la Segob estatal también pueda interpretarse como el inicio de su carrera rumbo a la gubernatura. Pero, reconoce que su estrategia está supeditada a que el PRI mantenga el control del Congreso del estado. “En matemáticas antes del dos está el uno y el uno es ganar el Congreso”, añade.
Y, agrega: “No lo descarto (buscar la gubernatura de Puebla), pero no está en mis planes inmediatos”.
Asimismo, López Zavala fue inquirido sobre el dictamen del ministro de la Corte, Juan Silva Meza, quien lo señaló como uno de los operadores utilizados por el gobernador Mario Marín Torres para encarcelar y violar los derechos de la periodista Lydia Cacho. “Soy un hombre limpio”, fue su respuesta inmediata.
Y, puntualiza tajante: “Fue una estrategia del PAN porque veían que iba a arriba en las encuestas para la presidencia municipal y ya. No me han probado nada, ninguna conversación o señalamiento. En año y medio nunca me mencionaron, resulta que cuando iba en las encuestas me sacan a la luz”.
–¿Entonces, no le afectó que el ministro Juan Silva Meza lo incluyera en el dictamen?
–En nada, lo que no mata fortalece, señaló lacónico.
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