¡Zavala... muuchoo gustooo! y se fué

CUITLATLAN
La lucha por los remanentes del PRI y del PAN
Fermín Alejandro García

El sábado, en la plaza comercial Las Palmas se toparon el coordinador de Promoción del voto del PRI, Javier López Zavala, con el senador Rafael Moreno Valle Rosas, quien estaba acompañado de José Cabalan Macari, el presidente estatal del Panal. Este encuentro no hubiera tenido nada de raro si no fuera porque los dos últimos fueron descubiertos en un intento de crear un movimiento disidente dentro del PRI, en el municipio de Tlaxco.
Ahí estaba Moreno Valle –quien se esfumó y evitó saludar a López Zavala– y José Cabalan Macari platicando con uno de los aspirantes a ser el candidato del PRI a edil de Tlaxco, con quien estaban pactando que si no ganaba en el proceso interno del tricolor, que se desarrolló el domingo, se pasaría en automático al Panal para ser postulado como abanderado.
Este hecho anecdótico muestra la lucha que en las dos últimas semanas han estado librando Javier López Zavala y Rafael Moreno Valle, quienes han estado a la caza de inconformes en el PRI y el PAN en todo el estado. Sobre todo de aquellos políticos que están agraviados por no haber alcanzado la nominación como candidatos a ediles, regidores o diputados.
En particular se sabe que Moreno Valle personalmente está visitando a los priistas que quedaron en el segundo, tercero y hasta cuarto lugar de los procesos de selección de candidatos del PRI para invitarlos a pasarse al Panal o al PAN, además de ofrecerles financiamiento para que puedan hacer campaña en contra del tricolor.
Se sabe que en varios casos logró su cometido el ex priista y senador panista, pero a partir de que López Zavala dejó la Secretaría de Gobernación y asumió el control de las campañas del PRI, se le han complicado las cosas a Moreno Valle, pues el nuevo dirigente tricolor ha desarticulado varios intentos de deserción.
Ejemplos se vieron en Tlaola, Cuetzalan y Xicotepec de Juárez, en donde el coordinador de promoción del voto del PRI retuvo a priistas que habían aceptado sendos ofrecimientos de quien fuera secretario de Finanzas en el gobierno de Melquiades Morales. En particular en el tercero de estos municipios, se retuvo a Edith Galindo y Guadalupe Esquitín, quienes son importantes activistas del Revolucionario Institucional.
Ahí no termina todo. Las dos últimas semanas López Zavala no solamente se avocó a cicatrizar heridas entre priistas, sino también anda buscando a los panistas inconformes con la designación de candidatos albiazules. Los está sumando al PRI.
Este activismo expone tres cosas:
1. Que existe una lucha codo a codo por los remanentes de los partidos importantes, pues en muchos municipios los votos de unos cuantos puede significar el triunfo o la derrota del PRI o el PAN. Eso habla del alto grado de competencia que se avecina.
2. Que el Panal es el partido de mayor activismo y fuerza luego del PRI y el PAN, mientras que el PRD parece estarse desdibujando del escenario electoral del estado.
3. Que la lucha electoral tiene a dos estrategas, a Javier López Zavala, en el PRI, y a Rafael Moreno Valle Rosas por parte del PAN y el Panal. Atrás de ellos se mueve el resto de la maquinaria de dichas fuerzas políticas.
Posdata: El sábado en el encuentro que hubo en la plaza Las Palmas el más espantado fue el priista de Tlaxco que al ser descubierto en su coqueteo con la oposición decidió ya no competir en el proceso interno del PRI.
Mario Rincón, a la dirigencia del PRI
El Comité Municipal del PRI en la ciudad de Puebla próximamente se quedará acéfalo, sin dirigentes. Quien parece tener el perfil y las posibilidades de llegar a ese cargo es Mario Rincón, actual secretario de organización de dicho órgano partidista.
El próximo domingo Humberto Vázquez Arroyo va a separarse del cargo de presidente del PRI en la capital, luego de que sea postulado como candidato a regidor en la planilla de la aspirante a edil de Puebla, Blanca Alcalá Ruiz.
Por prelación quien debe asumir la presidencia del partido es Sandra Montalvo, quien es la secretaria general, pero esta priista enfrenta dos obstáculos. Uno es que es la suplente de Héctor Alonso Granados, quien recientemente pidió licencia para dejar la diputación que ocupaba en el Congreso local. Eso obliga a la priista a ocupar la curul vacante.
Pero además los estatutos del tricolor prohíben a sus dirigentes ocupar al mismo tiempo un cargo de dirección partidista y un puesto de elección popular.
Otro obstáculo es que Montalvo está embarazada de varios meses.
Más allá de estas circunstancias, la posible llegada de Rincón a la dirigencia priista significaría darle un nuevo respiro al tricolor en el municipio, la cual está descuidado por la negligencia del actual presidente, Humberto Vázquez, quien con todo el cinismo se ha ausentado de las tareas del partido argumentando que no le pagan bien.
Rincón se ha convertido en un hombre clave para la candidata Blanca Alcalá Ruiz, ya que le ha organizado una reunión en cada distrito electoral de la capital con los comités seccionales, líderes de colonias y de organizaciones priistas. Lo relevante de estos encuentros es que se ha tenido una participación arriba del 70 por ciento de posibles asistentes.
Esos encuentros ayudaron a zanjar la falta de identidad que había de grupos priistas con la candidata.
Hace cinco años, cuando el aspirante del PRI era Carlos Alberto Julián y Nacer se hicieron reuniones similares, pero no acudió ni el 40 por ciento de los invitados. Desde que eso ocurrió muchos operadores del tricolor entendieron que dicho resultado era una muestra de que el candidato no era aceptado por las bases del otrora partido oficial.
Y así fue.