CUITLATLAN / La Jornada de Oriente
Famélica, la caballada pluri del PRI
Fermín Alejandro García
La lista de candidatos plurinominales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) muestra claramente que el grupo político del gobernador Mario Marín Torres, llamada la “burbuja marinista”, quiere tener un Congreso local a modo, pero no está garantizando una buena calidad de legisladores y una vez más muestra que es excluyente de otras corrientes priistas o en general de la sociedad.
Haber dejado fuera de las postulaciones a figuras como el ex secretario de Gobernación, Carlos Meza Viveros, o al ex diputado federal y ex secretario de Finanzas, José Luis Flores Hernández, impedirá que el PRI tenga en la próxima legislatura a buenos tribunos no solamente para debatir con la oposición, sino para elaborar leyes o incluso ejercer un moderado contrapeso al Poder Ejecutivo.
Tradicionalmente el tricolor siempre había llevado en su conjunto global de candidatos a cuatro o cinco figuras destinadas a convertirse en los líderes, los encargados del debate y de las comisiones importantes del Congreso local. Generalmente estos aspirantes eran postulados por la vía plurinominal.
Ahora parece haberse roto ese esquema y la caballada priista está flaca, carente de personajes que puedan dar una buena imagen y una consistente presencia a la bancada priista. Estas condiciones se observan lo mismo en la mayoría de los candidatos de mayoría que de representación proporcional.
Solamente parecen salvarse dos personajes. Uno es el ex secretario de Gobernación, Javier López Zavala, quien por ser el hombre fuerte de la “burbuja marinista”, y ya haber sido integrante del gabinete estatal y legislador –que era de una corriente priista contraria a la que dominaba en el sexenio anterior–, lo convierte en el líder de la fracción del Partido Revolucionario Institucional y quien seguramente tendrá un buen desempeño en los futuros trabajos del Congreso.
La otra es Roció García Olmedo, quien es candidata de mayoría por Atlixco. Esta mujer tiene una sólida preparación académica y una larga trayectoria política, incluso ya fue legisladora local y federal, además de ser una defensora del tema de equidad de género y de la legalidad. El problema es que fue postulada en uno de los distritos más reñidos y con posibilidades de que lo gane el PAN. Sería una lastima que no pudiera ocupar una curul.
Otra opción es José Alarcón Hernández, quien quedó como suplente de Javier López Zavala. Todo hace suponer que el segundo de ellos no va a terminar su periodo como legislador –pues buscará ser el próximo candidato a gobernador del tricolor–, y al subir el primero no solamente va a ocupar una vacante, sino también sería el líder de la fracción del PRI y presidente Congreso, en caso de que el tricolor ganara en la mayoría de distritos.
Alarcón es un hombre brillante y culto. Sin embargo su pasado está manchado por haber sido un “mapache electoral” en la época de Guillermo Jiménez Morales y que cuando fue diputado en la época de Mariano Piña Olaya toleró muchas aberraciones jurídicas.
De ahí en adelante, en el caso de la lista de pluris no existe una sola figura que se salve. En el segundo lugar está Valentín Meneses, el presidente del PRI, quien tal vez una persona bien intencionada y uno de los hombres más cercanos al gobernador Mario Marín Torres, pero sin experiencia como legislador y nunca ha demostrado ser bueno debatiendo, ni mucho menos elaborando proyectos. Además, parece un error haberlo juntado con Javier López Zavala, pues necesariamente uno va a opacar al otro.
En el tercer lugar de la lista está Ernesto Guerrero, el dirigente del PVEM, un partido parásito que desde hace varios años solamente gana votos haciendo alianzas con el PRI luego de que se demostró que dicho instituto político únicamente sirve para los negocios de sus dirigentes.
El cuarto sitio es para Leobardo Soto, el dirigente de la CTM, la cual es una central obrera que ha dejado de tener credibilidad e identidad con sus representados. Casi siempre los legisladores cetemistas han sido tibios y poco interesados en el trabajo legislativo.
La peor decisión es haber puesto en el quinto sitio a Cecilia Hernández, la secretaria general de la CNC, quien únicamente se ha distinguido por ser una dirigente gris y conflictiva.
La CNC tiene en su estructura medular 26 comités regionales. Uno por cada distrito electoral. Se sabe que la mayoría de los dirigentes de estas agrupaciones están alejados o confrontados con la secretaria general de la Confederación Nacional Campesina, como resultado del mal trato que esta mujer les da, además de ignorarlos.
Los dirigentes regionales han hecho su propia agrupación al margen de la CNC y no están dispuestos a apoyar en nada a Cecilia Hernández.
De ahí para adelante no tiene caso seguir comentando la lista priista, ya que solamente tienen posibilidades de entrar al Congreso quienes ocupan los cinco primeros lugares.
Ludivino Mora va por el Panal
Ayer se acabó de concretar la postulación de Ludivino Mora Tejeda como candidato del Panal a edil de Teziutlán, lo que ha prendido los focos rojos en el PRI.
Mora Tejada, quien fuera titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Puebla, es un hombre que cuenta con el apoyo de la mayoría de los ganaderos de la región, que son quienes mueven el mundo de la política y la economía en esa región de la Sierra Norte.
El PRI está preocupado debido a que tiene un candidato débil llamado Jorge Camacho Foglia, quien no fue aceptado por amplios sectores de este partido y es un político gris.
Hace algunos años Ludivino Mora trabajó arduamente la región. Tenía todo para ser postulado y arrasar en las elecciones de diputado federal. Lo apoyaban los priistas, los ganaderos y era bien visto hasta por gente ajena al PRI. En ese entonces decidió “sacrificarlo” el entonces gobernador Melquiades Morales Flores.
Ahora, el PRI parece que va a pagar las consecuencias de haber permitido que Ludivino Mora se fuera de las filas priistas.
Famélica, la caballada pluri del PRI
Fermín Alejandro García
La lista de candidatos plurinominales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) muestra claramente que el grupo político del gobernador Mario Marín Torres, llamada la “burbuja marinista”, quiere tener un Congreso local a modo, pero no está garantizando una buena calidad de legisladores y una vez más muestra que es excluyente de otras corrientes priistas o en general de la sociedad.
Haber dejado fuera de las postulaciones a figuras como el ex secretario de Gobernación, Carlos Meza Viveros, o al ex diputado federal y ex secretario de Finanzas, José Luis Flores Hernández, impedirá que el PRI tenga en la próxima legislatura a buenos tribunos no solamente para debatir con la oposición, sino para elaborar leyes o incluso ejercer un moderado contrapeso al Poder Ejecutivo.
Tradicionalmente el tricolor siempre había llevado en su conjunto global de candidatos a cuatro o cinco figuras destinadas a convertirse en los líderes, los encargados del debate y de las comisiones importantes del Congreso local. Generalmente estos aspirantes eran postulados por la vía plurinominal.
Ahora parece haberse roto ese esquema y la caballada priista está flaca, carente de personajes que puedan dar una buena imagen y una consistente presencia a la bancada priista. Estas condiciones se observan lo mismo en la mayoría de los candidatos de mayoría que de representación proporcional.
Solamente parecen salvarse dos personajes. Uno es el ex secretario de Gobernación, Javier López Zavala, quien por ser el hombre fuerte de la “burbuja marinista”, y ya haber sido integrante del gabinete estatal y legislador –que era de una corriente priista contraria a la que dominaba en el sexenio anterior–, lo convierte en el líder de la fracción del Partido Revolucionario Institucional y quien seguramente tendrá un buen desempeño en los futuros trabajos del Congreso.
La otra es Roció García Olmedo, quien es candidata de mayoría por Atlixco. Esta mujer tiene una sólida preparación académica y una larga trayectoria política, incluso ya fue legisladora local y federal, además de ser una defensora del tema de equidad de género y de la legalidad. El problema es que fue postulada en uno de los distritos más reñidos y con posibilidades de que lo gane el PAN. Sería una lastima que no pudiera ocupar una curul.
Otra opción es José Alarcón Hernández, quien quedó como suplente de Javier López Zavala. Todo hace suponer que el segundo de ellos no va a terminar su periodo como legislador –pues buscará ser el próximo candidato a gobernador del tricolor–, y al subir el primero no solamente va a ocupar una vacante, sino también sería el líder de la fracción del PRI y presidente Congreso, en caso de que el tricolor ganara en la mayoría de distritos.
Alarcón es un hombre brillante y culto. Sin embargo su pasado está manchado por haber sido un “mapache electoral” en la época de Guillermo Jiménez Morales y que cuando fue diputado en la época de Mariano Piña Olaya toleró muchas aberraciones jurídicas.
De ahí en adelante, en el caso de la lista de pluris no existe una sola figura que se salve. En el segundo lugar está Valentín Meneses, el presidente del PRI, quien tal vez una persona bien intencionada y uno de los hombres más cercanos al gobernador Mario Marín Torres, pero sin experiencia como legislador y nunca ha demostrado ser bueno debatiendo, ni mucho menos elaborando proyectos. Además, parece un error haberlo juntado con Javier López Zavala, pues necesariamente uno va a opacar al otro.
En el tercer lugar de la lista está Ernesto Guerrero, el dirigente del PVEM, un partido parásito que desde hace varios años solamente gana votos haciendo alianzas con el PRI luego de que se demostró que dicho instituto político únicamente sirve para los negocios de sus dirigentes.
El cuarto sitio es para Leobardo Soto, el dirigente de la CTM, la cual es una central obrera que ha dejado de tener credibilidad e identidad con sus representados. Casi siempre los legisladores cetemistas han sido tibios y poco interesados en el trabajo legislativo.
La peor decisión es haber puesto en el quinto sitio a Cecilia Hernández, la secretaria general de la CNC, quien únicamente se ha distinguido por ser una dirigente gris y conflictiva.
La CNC tiene en su estructura medular 26 comités regionales. Uno por cada distrito electoral. Se sabe que la mayoría de los dirigentes de estas agrupaciones están alejados o confrontados con la secretaria general de la Confederación Nacional Campesina, como resultado del mal trato que esta mujer les da, además de ignorarlos.
Los dirigentes regionales han hecho su propia agrupación al margen de la CNC y no están dispuestos a apoyar en nada a Cecilia Hernández.
De ahí para adelante no tiene caso seguir comentando la lista priista, ya que solamente tienen posibilidades de entrar al Congreso quienes ocupan los cinco primeros lugares.
Ludivino Mora va por el Panal
Ayer se acabó de concretar la postulación de Ludivino Mora Tejeda como candidato del Panal a edil de Teziutlán, lo que ha prendido los focos rojos en el PRI.
Mora Tejada, quien fuera titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Puebla, es un hombre que cuenta con el apoyo de la mayoría de los ganaderos de la región, que son quienes mueven el mundo de la política y la economía en esa región de la Sierra Norte.
El PRI está preocupado debido a que tiene un candidato débil llamado Jorge Camacho Foglia, quien no fue aceptado por amplios sectores de este partido y es un político gris.
Hace algunos años Ludivino Mora trabajó arduamente la región. Tenía todo para ser postulado y arrasar en las elecciones de diputado federal. Lo apoyaban los priistas, los ganaderos y era bien visto hasta por gente ajena al PRI. En ese entonces decidió “sacrificarlo” el entonces gobernador Melquiades Morales Flores.
Ahora, el PRI parece que va a pagar las consecuencias de haber permitido que Ludivino Mora se fuera de las filas priistas.
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