Ante la posible salida de Javier López Zavala de la Secretaría de Gobernación para luchar por la Presidencia Municipal de Puebla, tanto Guillermo Deloya Cobián, secretario particular del gobernador, como el por siempre perdedor electoral Mario Montero Serrano han mandado los mensajes de querer asumir ese puesto.
Deloya sueña con tener Gobernación en sus manos, y ahora se da el lujo de decirlo ante varios periodistas, pues se dice respaldado por todos aquellos funcionarios quienes participaron en la comida en el Chimichurri, donde quiso enviar el mensaje de que había un grupo contra López Zavala.
Ante el hecho de que López Zavala salga, el particular del gobernador aprovecha cualquier ocasión y momento para mirar la oficina de López Zavala y suspirar por ella.Quiere a como dé lugar ser el próximo consentido del mandatario estatal.Busca alianzas.
Teje amarres.Dicta columnas.Es decir, prepara el terreno para lograr la titularidad de la dependencia y bloquear a cualquier otro aspirante a suceder a López Zavala, en caso de que la decisión del gobernador sea mandar a este último como candidato del PRI a la Presidencia Municipal de Puebla.El sueño de Montero es regresar al gabinete, pero él cuenta con un gran veto: su pasado.
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