Tiempos de Nigromante
de Arturo Rueda
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Por amor a la precisión, como diría Octavio Paz en su polémica con Mario Vargas Llosa, el directo general de Intolerancia Diario, Enrique Núñez, debería hacer público el nombre del o de los responsables de su casa encuestadora. No se trata, en esencia, de descalificar el sondeo que ese periódico publicó ayer. Al contrario: sus resultados coinciden en líneas generales con los sondeos presentados previamente por CAMBIO -el de Opina en enero pasado y el de Datamática hace dos semanas-, aunque el de Intolerancia sólo abarca el espectro de la capital. Se trata, solamente, de dar mayor certeza al estudio conociendo el prestigio y experiencia de los responsables, una vez que en el futuro Intolerancia seguirá recurriendo a dichos ejercicios.
Hace dos semanas, cuando presentamos el amplio estudio de Datamática –más de 3 mil cuestionarios en todo el estado- más de tres rechazaron los resultados aduciendo que se trataba de una “encuesta a modo”, con un objetivo propagandístico más que informativo. Lo mismo se argumentó cuando en enero CAMBIO desató la lucha sucesoria con una encuesta de la prestigiada consultora Opina, dirigida por Rigoberto Benítez. Las reverberaciones de esos sondeos todavía se mantienen con la fiebre sucesoria.
Datamática e Intolerancia, así como los sondeos que Javier López Zavala mandó a hacer con Indicadores SC y otras empresas nacionales, coinciden en el mismo punto: Blanca Alcalá y Enrique Doger lideran la carrera sucesoria, muy a pesar de la alcaldesa y muy para regocijo del ex rector. El orden depende precisamente de dónde se hace la muestra. Parece obvio que en la capital ambos personajes lideren. Blanca Alcalá acaba de llegar al poder y todavía no acusa el desgaste del gobierno municipal. Doger recién terminó su periodo y mantiene el cartel a pesar de los ataques provenientes del marinismo. En la encuesta estatal, Doger toma la delantera por sus siete años como rector de la Buap, y Blanca desciende porque su figura apenas empieza a ser reconocida al interior del estado. Sin dudas, se trata de los activos tricolores frente a Rafael Moreno Valle.
El caso del senador panista en la encuesta de Intolerancia Diario concuerda también con los resultados de Datamática: Moreno Valle empezó liderando la carrera en enero, pero poco a poco se ha ido desinflando. La encuesta estatal de la empresa argentina lo colocó en tercer lugar de intención de voto, misma posición que ocupa en el sondeo capitalino de Intolerancia Diario. Y es que ya se sabe que la mayor fortaleza de Moreno Valle no se encuentra en Puebla capital, sino en el interior del estado.
Con el sondeo de Intolerancia Diario, más el cruce con los resultados de Datamática, Javier López Zavala se reafirma como la tercera carta electoral del priísmo, aunque sea la número uno en el ánimo del gobernador. Al delfín debió dolerle los resultados presentados ayer, y es que no podrá descalificar a Intolerancia llamándolo “periódico dogerista”. Un diario marinista lo ubica en el cuarto lugar. ¿Qué responderá?
Los resultados de Intolerancia son especialmente graves para Zavala en todos los rubros. A pesar de la exposición mediática que ha tenido desde que fue candidato a diputado federal –en el 2000-, diputado local, coordinador de campaña de Marín, secretario de Gobernación en la primera mitad del sexenio y rey del PRI en la campaña 2007, apenas lo conoce en 63 por ciento de los poblanos. Y de esos que lo conocen un 48 por ciento –casi uno de cada dos- no estaría dispuesto a votar por él. Lo dicho en la columna anterior: Zavala va en camino a convertirse en el Roberto Madrazo de Puebla. O de Chiapas, más bien.
En los números de Intolerancia Diario, el cruce de los rubros de conocimiento y confianza que determinan el potencial de voto, establecen que para la capital sólo hay dos punteros: Alcalá y Doger. Los separa un punto porcentual en la intención de voto: la alcaldesa suma 55.15 por ciento y el ex rector un 53.98 por ciento. Y Doger ya acabó su trienio. Moreno Valle se ha rezagado un poco y Javier López Zavala parece necesitar un fashion emergency para poder subir en las encuestas.
La encuesta de Intolerancia Diario, a pesar de que solo abarca la capital y no debe descalificarse el esfuerzo. El golpe a Zavala fue seco y tuvieron la capacidad de contener su antidogerismo. Pero sería interesante conocer a los responsables de Intolerancia Periodismo de Precisión. Por puro amor a la precisión.
*** El delfín se pone el saco. En el mail publicado ayer el nombre de Javier López Zavala no aparece por ninguna parte. Con su carta aclaratoria, queda claro que se pone el saco. Allá él y sus propiedades.
Por cierto: miente aquel que dice que Zavala es chiapaneco. En realidad el gentilicio exacto es que se trata de un pijijiapaneco. Suena a trabalenguas, pero así se denomina a los originarios de Pijijiapan.
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