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Radiante, entre abrazos y parabienes de sus casi 600 invitados, Rafael Moreno Valle festejaba el sábado su cumpleaños número 40, que en realidad se cumplió ayer lunes.
El escenario de su fiesta no podía ser mejor: el Salón La Reina de Las Bodegas del Molino, al que acudieron dirigentes y legisladores de casi todos los partidos políticos, empresarios, delegados federales, presidentes municipales, directores de medios de comunicación y demás personalidades.
El menú y las bebidas muy acordes con la ocasión y lo distinguido de sus invitados –entre ellos, la poderosa presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, y el director general del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes– que degustaron los sabores de la más típica gastronomía poblana: chilapeñas con diferentes guisos, paté de cuitlacoche y queso roquefort, chipotles rellenos de queso, sopa de flor de calabaza y hongos, mole poblano acompañado de arroz y frijoles, y strudell de manzana con helado de vainilla.
Platillos que se degustaron con vino tinto Juan de Albret, Tempranillo Reserva 2002, D.O. Navarra; whisky Chivas Regal etiqueta negra, tequila Don Julio reposado, brandy Torres, ron Havana Club, vodka Absolut, Bayleis y anís dulce Asturiana.
Los grandes ausentes al banquete son la subsecretaria de Gobernación, Ana Teresa Aranda y los compañeros de escaño del festejado en el Senado: Humberto Aguilar Coronado y Ángel Alonso Díaz Caneja.
El escenario de su fiesta no podía ser mejor: el Salón La Reina de Las Bodegas del Molino, al que acudieron dirigentes y legisladores de casi todos los partidos políticos, empresarios, delegados federales, presidentes municipales, directores de medios de comunicación y demás personalidades.
El menú y las bebidas muy acordes con la ocasión y lo distinguido de sus invitados –entre ellos, la poderosa presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, y el director general del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes– que degustaron los sabores de la más típica gastronomía poblana: chilapeñas con diferentes guisos, paté de cuitlacoche y queso roquefort, chipotles rellenos de queso, sopa de flor de calabaza y hongos, mole poblano acompañado de arroz y frijoles, y strudell de manzana con helado de vainilla.
Platillos que se degustaron con vino tinto Juan de Albret, Tempranillo Reserva 2002, D.O. Navarra; whisky Chivas Regal etiqueta negra, tequila Don Julio reposado, brandy Torres, ron Havana Club, vodka Absolut, Bayleis y anís dulce Asturiana.
Los grandes ausentes al banquete son la subsecretaria de Gobernación, Ana Teresa Aranda y los compañeros de escaño del festejado en el Senado: Humberto Aguilar Coronado y Ángel Alonso Díaz Caneja.
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Tristeando, con su inseparable móvil pegado a la oreja, Javier López Zavala acude en compañía su familia al salón Los Pinos de la colonia La Joya, muy cerca del mercado Héroes de Puebla, a la fiesta de primera comunión de Elihu Hernández Sánchez, hijo del subsecretario de Gobernación, Joe Hernández Corona.
A Zavala y su familia lo acompañan en la mesa principal algunos de sus ex subordinados y fieles seguidores: Rodolfo Herrera Charolet, Lázaro Jiménez de Aquino y el padre del comulgante.
A la comida asisten alrededor de 120 invitados, algunos más de los esperados, por lo que el menú –consistente en sopa seca de codito, pierna de puerco y ensalada de manzanas y uvas, también a la crema– tuvo que racionalizarse, lo mismo que los Fersan, y los Jarritos de dos litros.
El secretario de Gobernación, Mario Montero Serrano, y jefe formal del subsecretario de Asuntos Políticos de la misma dependencia, nunca llega a la comida, la que López Zavala abandona pasadas las 6 de la tarde.
A Zavala y su familia lo acompañan en la mesa principal algunos de sus ex subordinados y fieles seguidores: Rodolfo Herrera Charolet, Lázaro Jiménez de Aquino y el padre del comulgante.
A la comida asisten alrededor de 120 invitados, algunos más de los esperados, por lo que el menú –consistente en sopa seca de codito, pierna de puerco y ensalada de manzanas y uvas, también a la crema– tuvo que racionalizarse, lo mismo que los Fersan, y los Jarritos de dos litros.
El secretario de Gobernación, Mario Montero Serrano, y jefe formal del subsecretario de Asuntos Políticos de la misma dependencia, nunca llega a la comida, la que López Zavala abandona pasadas las 6 de la tarde.
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