miércoles, 18 de abril de 2007

Zavala se lava las manos en el asesinato del dirigente de Convergencia


Pilar Bravo / Foto Rafael Durán


La Secretaría de Gobernación rechazó categóricamente que la muerte del maestro Esteban Torres Aguilar, dirigente del Partido Convergencia de la región de Tehuitzingo, sea un crimen de orden político y aseguró que en la Mixteca no hay ajustes de cuentas, porque no hay delincuencia organizada que ponga en riesgo la estabilidad del estado. El secretario de Gobernación, Javier López Zavala, dio respuesta al dirigente de Convergencia, José Juan Espinosa, de las investigaciones que abrió la Procuraduría General de Justicia y de las líneas que seguía el titular de la Policía Judicial, Hugo Isaac Arzola, comisionado para dar pronto esclarecimiento a la muerte de Torres Aguilar muerto el miércoles.


Aclaró que el asesinato de Esteban Torres ni la agresión que supuestamente sufrió el presidente municipal de Huehuetlán El Grande, nada tienen que ver con ejecuciones, como tampoco son casos que pongan en jaque la gobernabilidad. Los dos asuntos son investigados como casos del fuero común y habrá de esperar los resultados que tenga la policía.


La muerte del líder de Convergencia, Esteban Torres, sucedió no en actividades de su partido, sino en acciones de comercio producto de la venta de camionetas, que al parecer llevó a mostrar a dos personas que salieron con destino a Izúcar de Matamoros y luego apareció muerto en la carretera a Acatlán.


Hasta ayer se tenían testimonios de familiares y de gente que vio a las personas que se fueron con Torres Aguilar.


Por eso la investigación se desplegó de inmediato en la zona para conocer los detalles de las actividades del maestro muerto y denunciado por su esposa.


Javier López Zavala rechazó que sea un crimen político, pero insistió en la necesidad de esperar los resultados. Por este hecho delictivo no representa que vaya a darse una ruptura del clima de orden y paz en la entidad, como tampoco se puede asegurar que este asesino vaya a poner en peligro las elecciones.


En Casa Aguayo, la procuradora Blanca Laura Villeda coincidió también en que el crimen no es político, respecto a los avances del esclarecimiento del supuesto atentado de Leandro Barrales, presidente municipal de Huehuetlán El Grande, que a la fecha aún no ha podido confirmar sus declaraciones ministeriales.

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