Edmundo Dantés
Negligencia zavalista permite la delincuencia organizada
Este lunes, uno de los medios más importantes y sólidos, El Sol de Puebla, informó que la entidad ocupa el 8vo lugar nacional en índices delictivos. Y ayer, domingo, otro diario con gran credibilidad y circulación, Milenio, dio a conocer que las tiendas de 24 horas llamadas Oxxo podrán permanecer abiertas solamente hasta las 12 de la noche y, según José Ventura Rodríguez Verdín, director del departamento de Registro y Fiscalización del ayuntamiento, la medida es para disminuir la cantidad de asaltos.
Por si fuera poco, el pasado sábado, Puebla sin Fronteras, uno de los medios que más y mejor periodismo hace, publicó que se concretó otro secuestro en Tehuacán, donde fue raptada una chica por la que sus captores piden 3 millones de pesos, cuyo caso - supuestamente – está siendo investigado por la secretaría de Gobernación.
Al mismo tiempo, La Jornada de Oriente, un periódico con gran prestigio por su objetividad y conocimiento de temas sociales, informó que desde hace días la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) mantiene vigilancia en el municipio de Tlapanalá y sus alrededores.
Este contexto deja claro que algo muy grave está pasando en la entidad en el área de Seguridad Pública y es necesario preguntarse ¿dónde diablos quedó la versión gubernamental de que “Puebla es uno de los estados más seguros del país”?, ¿qué pasó con las eternas cantaletas oficiales de que aquí “no pasa nada”, “no necesitamos la presencia del Ejército Mexicano”, “no estamos como en otros estados”.
Es importante preguntarnos cómo, cuándo, por qué y por culpa de quiénes se perdió la relativa seguridad pública que hace poco, muy poco tiempo, todavía teníamos. Lo cierto es que este auge de la delincuencia en la entidad no es producto de la casualidad o del azar, sino de la incompetencia de quienes tenían (y algunos todavía tienen) a su cargo la gobernabilidad de la entidad y no cumplieron con su cometido, porque estaban (y aún lo están) demasiado ocupados promoviendo al delfín Javier López Zavala.
Y aunque no se puede deslindar al actual titular de Gobernación, Mario Montero Serrano, de la actual crisis en materia de seguridad pública, porque hoy él es quien tiene buena parte de la responsabilidad en la materia, lo real es que la delincuencia organizada no se asienta en un estado de un día para otro y que fue López Zavala el que estaba (y está) demasiado ocupado en su fracasada precampaña y descuidó las labores de inteligencia y de vigilancia en la entidad permitiendo la llegada de las células delictivas que en este momento están actuando.
Además, hasta la fecha, López Zavala controla una buena parte de la secretaría de Gobernación, ya que le rinden cuentas a él los subsecretarios, empezando por Joe Hernández Corona. Esto implica que Montero Serrano sigue sin el control total de la dependencia, lo que le quita margen de maniobra y le resta facultades.
Incluso, el hecho de que José Ventura Rodríguez Verdín atente contra la libre empresa limitando el horario de trabajo de los Oxxos, implica un claro reconocimiento de la incapacidad del ayuntamiento para dar seguridad a esas tiendas. Y resulta que en la secretaría de Gobernación municipal está un zavalista declarado, Juan de Dios Bravo, que está más ocupado en promover a su jefe real que en coordinarse con otro inepto, Alberto Hidalgo Vigueras, para establecer mecanismos que eviten, o al menos, inhiban en un buen porcentaje el robo a los Oxxos.
Por si fuera poco, varios de los presidentes municipales a quienes les están explotando en sus narices los secuestros y las ejecuciones fueron impuestos por el delfín, empezando por el narcoedil, Rubén Gil Campos, a quien la secretaría de Gobernación que encabezó López le regaló el terreno de La Galarza para que hiciera negocios.
Estocada
* Puebla en EU y en el resto del país: Para “orgullo” de los poblanos, en especial del grupo que controla el PRI y definió las candidaturas a alcaldías en el 2007, podemos afirmar que Puebla sigue presente en la agenda mediática nacional y norteamericana… aunque sea con temas vergonzosos, como el del narcoedil Rubén Gil Campos, como lo demuestra en su columna “México de Carne y Hueso” el periodista mexicano radicado en Estados Unidos, Pedro García Aguilar, quien relató el caso titulándolo: La Negra Historia del Narco Alcalde Poblano.
García Aguilar, quien manda su columna por correo electrónico a 5 millones 200 mil contactos en México y EU, relató lo siguiente: “La Comunidad poblana de los Ángeles California y del Estado de Nueva York, hicieron circular una carta aclaratoria donde se deslindan de todo trato del narco alcalde poblano Rubén Gil Campos recluido en un penal federal por el delito de narcotráfico.
“Se comenta en Puebla York que el propio Rubén Gil Campos vociferaba en sus tremendas huarapetas, que regresaría a Izúcar de Matamoros Puebla para ocupar el cargo de Presidente Municipal llevando como suplente a su cuñado. Que este negocio ya estaba pactado en 2 millones de dólares, con un funcionario de primer nivel del gobierno del Estado de Puebla.
Efectivamente Rubén Gil Campos ocupó la Presidencia Municipal de Izúcar de Matamoros en compañía de su cuñado, la toma de protesta del narco alcalde fue impresionante por el acarreo de campesinos, la música, la comida, la bebida y los juegos pirotécnicos.
“Pero poco le duró el gusto a Rubén Gil que a escasos meses de ser Presidente Municipal de Izúcar de Matamoros, Agentes de la DEA lo detuvieron en el aeropuerto de la ciudad de Los Ángeles California por el delito de narcotráfico en la Unión Americana.
“Lo cierto es que Rubén Gil pretendía utilizar el Estado de Puebla como una segunda base de operaciones para cultivar, elaborar, fabricar, comercializar o distribuir enervantes, negocio que durante años realizó en los Estados Unidos de Norteamérica.
“A la detención del narco alcalde las autoridades poblanas quisieron tapar el sol con un dedo y el Secretario de Gobernación el Abogado Mario Montero Serrano declaró a los medios de comunicación, que Rubén Gil Campos no estaba detenido, que estaba internado en un hospital en Los Ángeles California con motivo de un padecimiento.
“Los poblanos se enteraron de la detención de este peligroso pillo, porque los periódicos norteamericanos publicaron la noticia en primeras planas. La población de Matamoros vivió días difíciles, porque el pueblo mostró su repudio al narco alcalde y a su cuñado Arturo Herrera Velázquez, quien se preparaba para asumir la presidencia municipal de Izúcar de Matamoros, durante varios días el pueblo mostró su inconformidad pero de la noche a la mañana apareció la mano negra que mece la cuna y hasta la fecha el cuñado del narco alcalde es el Presidente Municipal. Ver para Creer.”